ETAPA Nº 5

Recorrido Previsto: Ayegui – Torres del Rio
Distancia de la etapa: 26,50 Km.
Distancia acumulada: 142 km.

Hora de partida: 07:15 horas.
Hora de llegada: 15:10 horas.

Tuvimos suerte con el cambio de la etapa anterior, el albergue era mejor y además todas sus instalaciones solo las compartimos con dos personas más, un chico y una chica. La chica fue la estrella de la noche, tanto es así que encontró sobre su cama una linda rosa y se acerco a nosotros preguntando quien de todos había tenido la delicadeza y los cinco nos miramos unos a otros como queriendo desenmascarar al “Romeo”, lo único que alcanzamos a decirle fue que sentíamos no haber sido ninguno de nosotros, al final resulto ser el hospitalero.

Otra de las sorpresas de la jornada, fue que conseguimos un diploma por haber completado lo primeros 100 km., recibe en nombre de “Sayuguina”. Ahora nos las vemos para llevarlo en la mochila sin que sufra daños.

También llego lo más esperado, por alguno de vosotros, LA PRIMERA DISCURSION, los motivos, las ideas personales sobre creencias y religiones, pero no os preocupéis demasiado por qué no llego la sangre al rio. Para calmarnos fuimos a cenar y ver un poco de tele, después a la camita que se pilla con mucho gusto después cada etapa.

La mañana nos sorprendió con la lluvia que tanto esperábamos, recordad que compramos unas capas para ocasiones como esta y hasta hoy no pudimos estrenarlas, creímos haber tirado el dinero y sobrecargado la mochila en casi medio kilo y todo para nada.


Como observareis cada día salimos con la noche y hoy no iba a ser diferente, pero si hubo una diferencia, la primera fuente no era de agua sino de vino, gentileza de bodegas Irache. La leyenda que reza sobre la misma dice “¡Peregrino! Si quieres llegar a Santiago con fuerza y vitalidad, de este gran vino echa un trago y brinda por la felicidad”.


Hoy tampoco nos hemos librado de equivocar la ruta y además en los mismos metros más o menos, lo que no tenemos claro es si fue debido a nuestra torpeza o bien se produjo por la una mala señalización de la misma. En resumidas cuentas, estamos tan fuertes que no nos importa ir regalando metros al camino.

A unos 7 km. de la salida se encuentra Villamayor de Monjardin, a la impertinente lluvia que nos acompañaba se le unió el barro en una subida algo delicada hasta el albergue, algunos aprovechamos para aliviar, puesto que las ciruelitas pasas continuaban haciendo su efecto, otros se inclinaron por almorzar unos “bocadillitos” de chistorra. Observad la carita de felicidad que se le queda a uno después de semejante almuerzo.


Manolo opto por no almorzar, ya que cada parada supone para el problemas cuando se retoma la ruta, así que mientras unos estaban almorzando otro continuo caminando hasta la próxima parada que sería la de Los Arcos, la distancia que separa una de la otra, es la más grande de las que hasta hoy habíamos tenido entre una localidad y otra puesto que venían oscilando entre 4 y 6 kilómetros y esta tenia más de 12, todos ellos discurriendo entre caminos agrícolas donde el barro causo estragos en los peregrinos.


De nuevo todos juntos salimos camino de Sansol.

Con las fuerzas ya muy justitas debido a una nueva sesión de patinaje sobre barro llegamos a destino.



Solo nos quedaban 900 metros para alcanzar el objetivo de la jornada que no era otro que Torres del Rio.

Novecientos metros, que aunque parezcan poco, se vuelven eternos cuando uno lleva 2 kilos de barro en cada zapato y la lluvia te castiga con persistencia. Pero como no hay mal que cien años dure al final…


Nos acogió Mariela con un guisado de garbanzos calentito que reconforto nuestros cansados cuerpos.

Así que mañana más de lo mismo.